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La dirección hacia el éxito como interim manager

Como preámbulo diré que el interim manager es un servicio de contratación temporal (head renting) mediante prestación de servicios de directivos/as en sus diversas modalidades.


Mi ámbito de actuación se centra en la Dirección Financiera y Administrativa. En este campo he llevado a cabo recientemente una misión en la que el objetivo se centraba en una empresa que había incrementado su nivel de facturación, pero que seguía llevando a cabo una gestión del negocio que no se adecuaba a su actual dimensión. Acompañado a ello se había producido un cambio en la dirección de la misma, detectando grandes deficiencias en la gestión tanto económica como financiera de la empresa.


La empresa estaba soportando tensiones de tesorería y problemas en la gestión de la información, incrementándose el riesgo fiscal. Además, el ejercicio 2018 era el primero de auditoría obligatoria y era necesario disponer de información fiable que facilitar a los auditores con el objetivo de obtener un informe de auditoría sin salvedades ni limitaciones. Era un objetivo básico de cara a la negociación con los proveedores financieros. 


La primera labor a realizar en una empresa es reunirse con todo el personal implicado en la gestión de la misma, para obtener una visión global de la misma. Es muy importante transmitir a toda la plantilla un ambiente de confianza, en el que comprendan que nuestra labor consiste en evaluar la situación y ofrecer soluciones. Dar confianza de que nuestra labor no es la de obtener un beneficio a corto plazo sino la de encaminar a la empresa en un proyecto de futuro viable y sostenible, que permita mantener sus puestos de trabajo.


El principal problema con el que me encontré fue que la empresa no disponía de una contabilidad por centro de coste, y que la información económica de la que disponía era muy deficiente. Solucionarlo implicó una labor de análisis muy exhaustiva de la contabilidad de la empresa de los últimos tres ejercicios (la empresa no disponía de información fiable anterior a este periodo). Ello implicó la elaboración de unas cuentas de resultado por centro de coste de los últimos dos ejercicios para sacar conclusiones sobre la rentabilidad de cada una de las líneas de negocio de la empresa. La empresa tampoco disponía de un presupuesto para el ejercicio ni realizaba cierres mensuales para conocer la evolución económica de la misma.


Otra de las líneas de actuación consistió en adecuar las líneas de financiación de la empresa a sus necesidades de tesorería. Las líneas de que disponía eran insuficientes y a precios elevados para el volumen y características de la empresa. Se introdujeron nuevos proveedores financieros, que permitieron una ampliación de crédito y un descenso del coste medio.


Por último, se incorporó a la empresa a un nuevo Director Financiero y de Administración, con experiencia de más de diez años en gestión de negocios y proveniente del sector de la auditoría. Esta persona llevará a cabo el control de gestión de la empresa, con mi supervisión durante los primeros meses de su incorporación. 


Condiciones laborales del interim
La prestación de estos servicios no implica la existencia de vínculo laboral entre las partes. Ello implica que existirá un contrato de prestación de servicios entre el Interim y el cliente, en el que se definirá un ámbito de actuación, un plazo, unos objetivos y unas condiciones económicas. Mi experiencia personal es que este enfoque facilita la relación entre ambas partes, permitiendo una comunicación fluida que se basa en hechos objetivos, no desvirtuados por una relación laboral de jefe y empleado.


Relación con la propiedad de la empresa
Será necesario un contacto muy fluido con la propiedad de la empresa, para transmitir cualquier información que pueda ser relevante a la hora de la toma de decisiones. Durante el proceso se pueden detectar hechos que para la empresa no eran relevantes, pero que por la experiencia del interim se deben de tener en cuenta a la hora de la definición del Plan Estratégico de la empresa. Es necesario que la propiedad sea consciente de la importancia de no caer en la tentación de utilizar las habilidades del interim para el día a día, evitando que se desvíe de los objetivos fijados.


Por qué un interim 
Muchos pueden ser los motivos que favorezcan que esta figura sea adecuada para un periodo, que como he comentado anteriormente, será limitado en el tiempo. Una de ellas debe de ser la experiencia multisectorial del interim. Esto permite que se produzcan sinergias transversales entre diferentes sectores, y estrategias que ya han sido probadas con éxito en otras empresas. La experiencia de errores ya cometidos evita que estos se repitan.


Es también de vital importancia el hecho de que la mayoría de las pymes no pueden acceder a la contratación de una figura con la experiencia de los interim, ya que suelen encontrarse en rangos de sueldo elevados para la estructura de estas empresas. El interim permite limitar estos costes a un plazo, evitar salarios de indemnización y conseguir los objetivos deseados a un coste asumible por la empresa.

 

"FotoMarcos" Firma: Marcos Sanchón Fernández